Interemprendedor: Nuevo motor de la empresa
Un profesional creativo, con liderazgo emprendedor, capaz de proponer y desarrollar iniciativas de negocios, de mejora de procesos y/o productos en su empresa, logra concretar grandes ideas tanto para su organización como para sí mismo. Estamos ante la presencia de un “intraemprendedor”, que agrega enorme valor para la compañía.
Para fomentar el “interemprendimiento”, el directivo debe comenzar creando una cultura emprendedora en su ámbito de responsabilidad más inmediato. Es decir, una cultura donde se promuevan las ideas y no se castiguen los errores. Debe montar procesos de búsqueda de nuevas iniciativas y la mejor forma de implementarlas.
Lo que caracteriza al “interempendedor” es la disposición a pensar distinto, a saltar barreras, un inconformista del status quo. La cualidad básica es la iniciativa. El “intraemprendedor” es todo lo opuesto de la persona que está esperando que se le diga lo que debe hacer y cómo hacerlo. En general son personas que saben cómo moverse, dispuestas a asumir riesgos y no temen equivocarse.
Respecto a las motivaciones, al “interemprendedor” lo mueve la satisfacción de ver su proyecto hecho realidad. Su principal motor es que la idea se realice y que lidere el proyecto que él mismo gestó, aportando al crecimiento de su empresa.