El ejecutivo que potencia la felicidad transversal
El líder que persigue el crecimiento humano
Si antes las competencias duras eran la clave para asumir una posición estratégica, hoy sólo constituyen un desde, un primer filtro en un proceso de selección. Líderes que destacan hoy son mentores de los equipos que lideran, preocupados del crecimiento humano de sus colaboradores, influyentes, transformadores, inspiradores y conectados con sus emociones y con las de los demás. En definitiva, seres humanos que tienden a perseguir la felicidad.
La felicidad es transversal, se extiende a todos los ámbitos de la vida del ser humano, incluyendo el laboral, de ahí la importancia de encontrar la felicidad en él. Las competencias blandas de los ejecutivos claves juegan un rol primordial en este logro, destacando el perfil del colaborador optimista, quien convierte toda circunstancia negativa o neutra en una oportunidad; otro es el que actúa con un enfoque permanente en la mejora y con la mirada puesta en un paso más adelante; y otro es el 100 por ciento innovador y, por ende, adaptado a los tiempos.
La clave es mirar y analizar desde una óptica valorativa los sucesos, reconociendo las fortalezas y oportunidades de cada situación y ser humano, por sobre las posibles falencias. Esta habilidad incide directamente en la forma de relacionarse con los demás, fundamental en un liderazgo bien conducido.
Por otra parte, la mentalidad positiva inspira, de manera que las buenas y novedosas ideas y soluciones fluyen en ellos espontáneamente. Por eso en un entorno laboral feliz, la alta productividad surge por defecto.
Finalmente, este perfil de ejecutivos está conectado con las emociones propias y las de los demás, logrando sacar lo mejor de todos, potenciándolos y haciéndolos crecer en sus cualidades humanas, el punto de partida del éxito, entendido como felicidad en toda su magnitud.
Agosto 2012