Asumir un nuevo cargo implica muchos desafíos, más aún ahora con modalidades de trabajo diferentes, en algunos casos presencial, pero en varios en modo híbrido e incluso 100% remoto, lo que adiciona y dificulta aún más de reconocer y entender los códigos propios de una nueva cultura organizacional y asimilarlos, hasta validarse en su posición frente a sus reportes. Pero de todos ellos, el principal desafío es lograr resultados exitosos.
Los ejecutivos que asumen nuevos roles se ven enfrentados a muchas demandas en poco tiempo, por lo que alinear con su jefatura directa cuáles son los focos y prioridades de los primeros meses, es un hito clave para avanzar a paso seguro. Ser capaz de identificar cuales son las primeras “victorias” importantes a alcanzar, que tengan un “alto impacto” y que sean de “fácil implementación”, permitirán el éxito de poder mostrar resultados.
Para el nuevo ejecutivo es una herramienta de gran valor en su posicionamiento y validación en el cargo, el conseguir esos resultados exitosos, y para ello se requiere de la competencia clave de: Orientación al Logro, que es la que permite orientar las acciones hacia la meta esperada, actuando con velocidad y sentido de urgencia ante decisiones importantes, fijando en primer lugar, metas desafiantes por encima de los estándares, mejorando y manteniendo altos niveles de rendimiento. Un profesional que cuenta con esta competencia, estimula la mejora continua y la orientación a la eficiencia, trabajando con objetivos claramente establecidos, realistas y desafiantes.
El segundo desafío al asumir un nuevo cargo, es la adaptación a la cultura de la empresa, que necesita estar constantemente repensando sus modelos de negocio y el perfil de colaboradores que requieren contratar para gestionar estas transformaciones permanentes. Se trata de la capacidad del profesional para adaptarse en el tiempo mediante el reconocimiento e interpretación de señales culturales, lo que influye directamente en el éxito laboral.El tercer desafío a la hora de asumir un nuevo cargo, es la validación en el liderazgo, que es la habilidad de un líder dde desarrollar y lograr buenos seguidores, y para conseguirlo la forma de comunicar, delegar y gestionar los conflictos es decidora decidora pues deberá ejercerlos con sabiduría, sutileza y determinación.
Los escenarios, contextos y caminos para ejercer un nuevo cargo pueden ser muy distintos, algunos más extensos que otros y en ocasiones con menos o más apoyo de la empresa. El acompañamiento de la organización, por medio de programas de Onboarding resulta crucial, aunque suele ser escaso y poco frecuente. Es vital guiar a los profesionales, sobre todo, en aspectos de liderazgo. El correcto apoyo a los nuevos colaboradores sólo da buenos resultados, mientras que una gestión sin estrategia y más operativa obtiene resultados deficientes.